Me quedo dormido en la puerta de embarque del puente aéreo Barcelona Madrid y pierdo el avión con mi tarjeta de embarque en la mano. No me lo creo. ¿Sr. Moltó? Un azafato de tierra muy amable me gestiona en la misma puerta el cambio de vuelo. Me pide la tarjeta de Iberia, me pone en zona preferente para el siguiente vuelo. Intenta consolarme. Tengo un cabreo inusitado. Un cabreo contra el mundo. He sido yo que me he dormido después de una rica comida familiar en Barcelona para celebrar un 80 cumpleaños. Qué hombre más amable. Cuando estoy más despierto soy consciente de que le he pasado el brazo por los hombros en señal de agradecimiento y aturdimiento. Todavía dormido. Gracias. Iberia me ha fastidiado muchas veces ¿Iberia? No. Alguien de Iberia. Hoy ha sido alguien de Iberia quien me ha tratado bien y no le he dado las gracias como merecía.

En el avión “que sale en seguida” leo La Vanguardia. Un artículo espléndido de María-Paz López. Qué raro suena un nombre tan español en La Vanguardia. Lo releo y sí. Es María-Paz. Con sus acentos y sus zetas. “La basura enloda la campaña” Nos hablan de Italia. Quién lo diría. Nuestra campaña ya ha pasado. María-Paz nos explica que “A la camorra no le interesa que haya incineradoras ni vertederos fijos, sino que la basura esté siempre en circulación”. Lo pone en boca del sociólogo Nico Pirozzi. Y en mi aletargamiento pienso que es lo mismo que sucede con los coches, que no encuentran nuca sitio para aparcar. Qué buen artículo sobre Italia. Qué bien escribe María-Paz. Y yo sin conocerla. Manda en La Vanguardia de hoy.

En Público no hablan de Italia, pero Rafael Reig brilla grande, como siempre. Nunca estoy de acuerdo con él, pero qué desacuerdo más bonito. Me recuerda a mi novia, que piensa bien, pero mal.

En el asiento 2F de este avión hay una chica, que también me recuerda a mi novia. Tiene un escote blanco, sobrecogedor, de piel blanca y pelo castaño, rizado, irrefrenable, con coleta mal guardada. Me seduce todo el rato sin querer (o queriendo). Me cuesta escribir y no mirarla. Tiene una rosa tatuada en el hombro.

Rajoy ha dado un golpe de mano en el PP. Lo cuentan todos los diarios. Soraya Saénz de Santamaría está en todos sitios. Promete y no jura su cargo. Sin embargo, me parece moderna de boquilla. Se afilió al partido cuando le dieron un cargo y no al revés. Tanto interés me desconcierta.