En una economía más o menos eficiente, con procesos ‘just in time’, la huelga de transportistas es muy dolorosa para la sociedad. El transporte es un eslabón determinante en la cadena de una economía bien estructurada. Parece ser que almacenar, por el motivo que sea, es menos eficiente que distribuir frecuentemente de forma ordenada.

En el año 96, durante una huelga de transportistas que obligó a parar varias cadenas de producción de fabricantes de coches, le pregunté en Radio Intereconomía a Honorio Pertejo, presidente de Sogedac, si situaciones así no ponían en cuestión sistemas de producción como el ‘just in time’. Honorio Pertejo contestó:

– Las decisiones no deben tomarse en función de las excepciones.

Está claro. Lo que se gana durante un periodo de buen funcionamiento no se pierde durante una huelga excepcional. Lo que se gana con una buena gestión para condiciones normales, permite pagar los gastos extras de situaciones excepcionales. Esta reflexión de Honorio Pertejo durante aquella entrevista me ha sido muy útil para mis decisiones posteriores.

Que los transportistas sean el eslabón fuerte de la cadena de un sistema eficiente no es problema mientras haya competencia en el sector y se pueda optar entre unos y otros. El problema surge cuando los transportistas se convierten en grupo de presión y luchan todos unidos, en acuerdos que desde algún punto de vista atentan contra la libre competencia y por tanto habría que estudiar su adaptación a las normas de libre mercado.

El derecho a la huelga está reconocido en nuestra Constitución. Pero se echa en falta una ley que regule con precisión este precepto constitucional. En la huelga que empieza hoy, una mayoría de los transportistas no defiende la huelga, pero la presencia de piquetes dificultará que ejerciten su voluntad de trabajar y negociar sin violencia.

Recomiendo el comentario de Fernando Urbaneja, en 20 minutos. Lo he leído esta mañana en el autobús mientras venía trabajar. El transporte público tiene muchas ventajas.

Una huelga que puede arruinar al gobierno