Pongamos que la huelga ha sido un éxito. Son las once de la mañana, pero pongámonos en lo mejor para los convocantes. Ha sido un éxito. ¿Y ahora qué?

Mañana volvemos a trabajar.

¿Qué legitimidad da la huelga general para hacer qué? Si alguien pretende utilizar el éxito de la huelga para cambiar las leyes, habrá otros muchos que también convocarán huelga general (o cualquier otra sentada) para deslegitimar esta huelga general. ¿Se mide la legitimidad para cambiar leyes por la capacidad para paralizar la economía de un país? ¿Por qué esa capacidad da más legítimidad que las armas?

La huelga general es una herramienta del pasado. Puede ser un éxito, pero ese éxito no legitima a nada.

Estoy de acuerdo, no tenemos herramientas buenas para impedir que la democracia sea un remedo de no sabemos muy bien qué, pero de algo mejor que esto, seguro.

Como no tenemos herramientas buenas, tenemos que aprender, tenemos que encontrar herramientas útiles para que los ciudadanos estudiemos, estemos formados, seamos conscientes de nuestra importancia y votemos con conocimiento, con capacidad para exigir y con mecanismos para hacerlo.

No tenemos nada de eso y tenemos que esforzarnos por conseguirlo. En lugar de huelga general, sería más fructífero convocar a una hora de lectura al día.

La huelga general es un reflejo de nuestra falta de competitividad, de nuestra falta de creatividad. Utilizamos (¿por pereza?) recursos antiguos en un mundo nuevo.

Hoy hemos vuelto a fabricar un destornillador plano, maravilloso, pulidito, con un mango impecable, capaz de aplicar un par de fuerzas exacto. Una joya. Pero lo que tenemos delante es una tuerca.

Mis amigos me responden. «¡Sí. Pero algo tenemos que hacer. No podemos quedarnos sentados con los brazos cruzados!».

Pues no estoy tan seguro de que no debamos hacerlo. Sentarnos, cruzar los brazos, debatir y pensar. Moverse por moverse es un disparate. Las actividades que son pura pérdida de tiempo, de recursos y de energía, no son inocuas. Desgastan y consumen sin aportar nada.

Esta huelga general ha sido un éxito, pero no sirve para nada. No puede servir para nada.

Es mucho más útil que pensemos para buscar y encontrar herramientas que sirvan, aunque parezca que no hacemos nada. Aunque nos lleve treinta años.