Buenas amigos/as,

Un último post en 2009 simplemente para agradeceros el tiempo que habéis dedicado a este blog. No sé si hemos creado una comunidad o algo por el estilo, pero lo que sí puedo decir con certeza es que por estos parajes pulula una serie de personas con las que da gusto discutirse y/o llevarse la contraria. No pretendo hacerle la pelota a nadie (se me da muy mal y se me nota que miento) sino simplemente dejar constancia de que pocas veces uno puede escribir tranquilamente sabiendo que, por extremas que sean sus opiniones (mantengo que Avatar es una obra maestra), nadie va a clavarle un cuchillo –aunque sea virtual– en el cuello.

Este ha sido un año jodido amigos/as, lo ha sido a nivel personal, lo ha sido a nivel económico y lo ha sido a nivel laboral. Tampoco el cine ha podido huir de esta tendencia: de las cinco películas más taquilleras del año cuatro eran franquicias. Efectivamente, hay que joderse. Salvaría a Star Trek, que me parece una película excelente, y dejaría que los otros títulos ardiesen en el fuego eterno. No es que yo sea partidario de quemar nada, pero hasta aquí hemos llegado.

No sé qué pinta tiene el año que viene, de las cosas que están por llegar solo he visto La carretera, que me pareció una auténtica mina: la pisas, vuelas y solo cuando aterrizas te das cuenta del daño que te ha hecho.

Una película dolorosamente necesaria que os recomiendo de corazón. Aunque solo sea porque al salir del cine digáis: “menos mal, todo sigue en su sitio”.

Personalmente espero con ansiedad el estreno de The social network, el filme de David Fincher sobre el fundador de Facebook (con guión de Aaron Sorkin, el genio que creó El Ala oeste de la Casa Blanca) y Shutter Island, la última película de Martin Scorsese basada en la –superlativa– novela de Dennis Lehane.

También tengo curiosidad por ver lo nuevo de Tim Burton (Alicia en el País de las maravillas), Christopher Nolan (Inception, ya comentada aquí), Clint Eastwood (Invictus) o Peter Jackson (Lovely bones… a la que la crítica estadounidense está poniendo a parir, y de qué manera).

En la tele puedo decir que no perdáis de vista Sons of Anarchy (la serie de los moteros que ha encandilado a América) y me muero por ver Treme, la nueva serie de David Simon, creador de The wire y Generation Kill y el tipo más grande que ha dado el formato desde Edward R. Murrow, aquel mítico periodista que siempre se despedía diciendo: “buenas noches y buena suerte”.

Feliz año a todos/as, nos reencontramos en 2010.

T.G.