DESCRIPCIÓN GENERAL:

El Chevrolet Cobalt es un sedán del segmento “B”, de 4,48 mts. de largo, 1,74 de ancho y 1,51 mts. de alto, basado en la plataforma GSV de GM (la misma de los Aveo y Trax), con la batalla aumentada a 2,62 mts. Las vías delanteras y traseras son de 1,50 mts. El peso aproximado en orden de marcha varía (según la combinación de motor y transmisión) entre los 1130 y 1160 Kgs. En todas sus versiones lleva neumáticos 195/65/15. Se vende (por ahora) en el bloque Mercosur (Brasil, Argentina, Uruguay, Paraguay), Colombia y en países de Europa Oriental como Rusia y Uzbekistán. También está previsto que se venda en India y China.

Chevrolet Cobalt. Frontal.

Los precios en Argentina se inician en aprox. 13.400 Euros (versión LT con motor 1.8 gasolina y cambio manual), y llegan a los 16.100 Euros (versión LTZ con motor 1.3 diesel y cambio manual). Sus alternativas (sedanes del segmento B con gran espacio interior y bajo costo) en Argentina son el Nissan Versa, Renault Logan, Toyota Etios Sedán y Fiat Grand Siena. En un futuro podrían agregarse el Peugeot 301/Citroen C-Elisee y VW Santana (similar al Skoda Rapid/Seat Toledo pero con tapa de maletero, no con portón), siempre y cuando se vendan a precios razonables.

En Argentina se vende con un antiguo motor de Gasolina de 1.8 Litros y 8 válvulas (105 CV@5600RPM y 161 Nm@3200RPM) y con el más moderno Turbo Diesel de 1.3 Litros (75 CV @4000 RPM y 190 Nm @1750 RPM) que llevan el Chevrolet Aveo y el Opel Corsa en España. Siempre los motores son transversales y la tracción es delantera. La transmisión es manual de 5 marchas, y solo para el motor de gasolina con el equipamiento LTZ hay opción de transmisión automática (convertidor de par) de 6 marchas. El motor de gasolina de 1.8 litros se utiliza en Sudamérica desde el año 2002, equipó a los Chevrolet Corsa II (Opel Corsa C) y Meriva hasta que se discontinuaron en el año 2012. Ahora equipa al Cobalt y a la minivan Spin (sustituta de la Meriva por aquí). Es un motor de la familia 1 de GM (debutó con el Opel Corsa B por 1993), que ha sido evolucionado hasta la fecha, pero cuenta con limitaciones como su desfavorable relación R/L (por usar bielas cortas) y la culata de 8 válvulas. Así y todo, cumple con su misión de mover con suficiencia al vehículo, con un consumo no bajo pero razonable, y un costo de mantenimiento bajo.

Chevrolet Cobalt. Salpicadero

Se vende en 2 versiones de equipamiento (LT y LTZ). Desde la versión LT viene con Dirección Asistida (Hidráulica), Aire Acondicionado, Elevalunas eléctricos delanteros, Cierre Centralizado automático en rodaje con control remoto y alarma, Asiento del Conductor y Volante con regulación en altura, Radio CD con 4 parlantes y MP3/USB/Bluetooth. La versión LTZ agrega Elevalunas eléctricos traseros, llantas de aleación, faros antiniebla delanteros, control de audio al volante (que viene forrado en cuero en esta versión), regulación interna de altura de faros y ordenador de a bordo. En la versión con transmisión automática se agrega control de velocidad crucero.

Destaca especialmente por la capacidad interior, sobre todo en el asiento trasero. Además se destaca por la capacidad de maletero, 563 Litros VDA.

Chevrolet Cobalt. Maletero

 

El equipamiento de seguridad es común a toda la gama. En seguridad pasiva hay solo de Airbags frontales (conductor y pasajero), no hay cinturón inercial ni apoyacabezas para la quinta plaza, y tampoco ganchos isofix en el asiento trasero. En seguridad activa solo hay ABS + EBD + AFU (con discos ventilados adelante y tambores detrás), no hay control de estabilidad. Vale destacar que ese equipamiento es en general (salvo el Nissan Versa) el mismo que tienen sus competidores directos.

En Argentina no hay normas sobre consumos homologados ni nada que se le parezca. Por lo tanto los datos de consumo reales son los que pueden suministran los usuarios del vehículo en condiciones de utilización real. Pero podría decirse que el motor Diesel consume tan poco como un Aveo Sedan con ese mismo motor que se vende en España. Ya el Gasolina tiene un consumo algo elevado sobre todo en ciudad, pero sin llegar a ser motivo para definir la compra o no del vehículo.

INTERIOR:

El interior destaca por su amplitud general, y sobre todo en las plazas traseras. La medida menos favorable es el espacio para cabeza en las plazas traseras, que es de 90 cms. Pero los 72 cms. para piernas y 138 cms. para hombros (todas hechas con el criterio que siguen en km77.com) son propias de los sedanes más espaciosos del Segmento “C”.

La posición de conducir es cómoda, más bien alta, pero se logra una buena relación entre piernas estiradas y volante cercano a los brazos, que no siempre es fácil conseguir. Los cinturones delanteros son regulables en altura, pero solo el del conductor cuenta con pretensor.

Chevrolet Cobalt. Asientos delanteros

Los asientos delanteros son cómodos y dan una sujeción normal. Los tapizados son correctos, sencillos pero agradables. El asiento trasero es cómodo, el respaldo tiene la inclinación correcta y como ya comenté existe muy buen espacio para estirar casi completamente las piernas. Falta el cinturón inercial y el apoyacabezas del quinto pasajero, que si bien no irá cómodo como los otros 2 por la altura del piso, tiene lugar para ubicarse. En este sentido (ancho) las plazas traseras son similares a un Logan de primera generación.

Los materiales del interior son correctos para el precio y segmento. Obviamente todo es plástico duro, pero de texturas correctas y en una interesante combinación de colores. Destacan las rejillas de ventilación, visualmente más parecidas a las de modelos más caros, no dan la sensación de pobreza de las salidas redondas y con tapa de un Logan. También destacan la iluminación en las plazas traseras, el doble bolsillo en los respaldos de los asientos delanteros, y los 3 asideros de techo con retorno amortiguado. Tiene buena cantidad de portaobjetos y posavasos, solo faltarían uno en cada puerta trasera. Como punto mejorable está el encastre de ciertas piezas, por ejemplo la tapa lateral del panel torpedo del lado izquierdo en mi coche está mal ajustada, tal cual se ve en la foto.

Chevrolet Cobalt. Asientos traseros

El instrumental es similar al del Aveo y Trax, con velocímetro y marcador de combustible digitales y cuenta revoluciones de aguja. A mi me resulta muy fácil y rápido de leer, además está bien iluminado siempre. El punto negativo es la ausencia de marcador de temperatura del motor, algo que se generaliza más y más, incluso en coches caros.

Chevrolet Cobalt. Instrumentación

Mención especial para el maletero, con 563 Litros VDA y unas medidas (mínimas, con el criterio de km77.com) de 101 cms. (profundidad), 103 cms. (anchura) y 53 cms. (altura). De lo mejor en vehículos tipo Sedan de cualquier segmento. Punto negativo por no contar con apertura interna, solo se abre con la llave desde la cerradura del maletero o con el control remoto integrado en la misma llave, pero solo cuando está fuera del tambor de arranque.

La rueda de repuesto es de emergencia, habiendo lugar para una de tamaño normal. Este punto es crítico para los caminos del Mercosur, con largas distancias a recorrer y gran cantidad de baches.

CONDUCCIÓN:

La conducción en ciudad de la versión con motor gasolina de 1.8 Litros y caja manual resulta relajada y placentera por las razones que describo a continuación:

-El motor cuenta con buen empuje desde muy bajas RPMs, ya desde el ralentí empuja bien, incluso arranca sin apretar el acelerador.
-El tacto de la palanca de cambios es impecable: suave, preciso, de recorridos cortos.
-La dirección (pese a ser hidráulica) es muy suave y a la vez directa, con capacidad para maniobrar bien en poco espacio.
-La insonorización del motor es muy buena. No ocurre lo mismo con el ruido de rodadura, que es muy perceptible, y lo atribuyo a las cubiertas Bridgestone Turanza ER300.
-La suspensión está muy bien calibrada, y en conjunto con el generoso perfil de neumáticos hacen que los baches se sientan muy poco en el interior, no trasmite golpes secos.

 

Chevrolet Cobalt. Imagen lateral-trasera

El consumo de combustible en ciudad no es bajo, resultando de unos 10 Lt/100 kms. en condiciones reales de utilización, sin Start/Stop obviamente. Pero tampoco resulta tanto más alto que el de sus competidores como para definir una compra.

En carretera es un coche aplomado y sereno, con muy buena predisposición para encarar viajes. La transmisión tiene el esquema 4+E en sus desarrollos, teniendo la 5º un desarrollo de 38 kmh/1000RPM. El bajo régimen en carretera, sumado a la buena insonorización del motor, más la excelente insonorización eólica dada por el doble burlete completo en todas las puertas, hacen que el interior sea muy silencioso, siendo el sonido de rodadura el único que se percibe en el interior.

La suspensión bien puesta a punto, en conjunto con las generosas batalla y vías, la elección de neumáticos con suficiente ancho (195) y el tacto de la dirección hidráulica, hacen que la estabilidad direccional en carretera sea destacable. No tuve oportunidad de probar reacciones ante maniobras bruscas, pero da la impresión de que no habrá sorpresas, dobla bien apoyado y sin inclinarse demasiado.

Chevrolet Cobalt. Motor

El consumo en carretera resulta lógico, de unos 7 Lt/100 kms. promedio a una velocidad aprox. de 120 km/h. El depósito de combustible (abre solo con la llave) tiene 54 litros, dando una autonomía razonable.

El gran mérito del coche es que, por un precio bajo, da el espacio interior (y más maletero) y las sensaciones de conducción de un sedán del segmento superior. Recientemente he conducido un Toyota Corolla año 2012 (que es un 50% más costoso) y las sensaciones son muy parecidas, salvando las diferencias lógicas.

Guillermo Salaverry.
Rosario – Argentina