Otro día largo y complicado… Como era de esperar, hemos tenido problemas al salir detrás de Robby. En el kilómetro 77 lo hemos atrapado y no nos ha dejado pasar hasta llegar al 136, con lo que hemos perdido bastante tiempo. Pero no hemos desesperado, ya que el día era largo.
etapa4_dakar_2014_1

Más fortuna hemos tenido con el buggy de Chicherit, que se ha roto, y con el Toyota Hilux de Poulter, que se ha parado para hacer una reparación de urgencia. Esto nos ha proporcionado un hueco de 8 minutos hasta llegar a Holowczyc y a Terranova, que iban muy juntos.
Los hemos alcanzado a los pocos kilómetros y hemos estado bastante tiempo en su estela de polvo, lo que nos ha hecho perder muchos minutos. Además, estar metidos en el polvo nos ha hecho pasarnos un cruce poco visible, situación que hemos resuelto rápidamente, no perdiendo demasiado tiempo. Poco después hemos resuelto la situación, superando a ambos y a la caza del resto.
Hemos apretado muy fuerte en las zonas sinuosas, donde los Mini funcionan a las mil maravillas, y en la zona de fuera pista hemos ido con cuidado, pero para no perder la costumbre… el pinchazo de rigor. Creíamos que se trataba de un pinchazo lento y hemos seguido, hasta que al llegar a un escalón la llanta se ha partido.
En el final de la etapa la navegación no ha sido nada fácil y creo que habrá lío en la de atrás de la carrera. Hay muchos cauces dentro del mismo río, que te desvían de la trayectoria correcta que te lleva a los WPM o waypoint escondidos.
Estamos contentos con el resultado de hoy y queda mucha carrera por delante. Nasser cada día está más compenetrado con el coche y poco a poco se encuentra más a gusto con él.
Mañana toca otra jornada maratoniana con dos especiales diferentes, con algo de arena al principio del tramo para entrar en calor. Bueno, calor… aquí hay para hartarse.